Esta es una comedia de humor negro que transcurre en una selva urbana, en donde cada quien tiene que velar por su propia supervivencia. Nadie es malo, pero todos actúan en su propio beneficio y sin medir si sus actos perjudican a otros. El ex sargento Diógenes Hernández (Alvaro Rodriguez) es dueño de "La Universal", una precaria agencia de detectives privados en el centro de Bogotá, que tiene como sede el mismo apartamento en el que él y su esposa Fabiola (Jennifer Stephens) habitan. Su sobrino, Clemente Fernández (Robinson Diaz), quien trabaja en la agencia, sostiene un romance con Fabiola, sin pretender herir los sentimientos de su tío, pero impulsado por la necesidad de mitigar su vacío de hombre urbano y anónimo.